El Ayuntamiento de Sant Feliu de Llobregat incrementará a partir de otoño la presión para reclamar el soterramiento de las vías de tren con la organización de actos reivindicativos que incluirán el corte puntual de la circulación de convoyes a la altura del paso a nivel que hay junto a la estación de Rodalies en el que 27 personas han perdido la vida en las últimas tres décadas.El proyecto de soterramiento de las vías en Sant Feliu es una de las numerosas víctimas de la crisis económica. Está redactado y presupuestado, pero el Ministerio de Fomento ha postergado su ejecución a causa de las restricciones presupuestarias.
Entre septiembre y noviembre, los últimos sábados de cada mes, el Ayuntamiento organizará los ‘Sábados por el soterramiento’, una serie de movilizaciones en las que quiere que la ciudadanía reclame el inicio de las obras. “Serán acciones amables”, según el alcalde, Jordi San José, que explica que están negociando con la dirección de Renfe “la hora y el formato para poder cortar las vías durante unos minutos a la altura del paso a nivel donde haríamos una cadena humana o alguna otra acción de este tipo”.
El alcalde defiende la necesidad del soterramiento “porque no es sólo una obra que beneficie a Sant Feliu, sino que es crucial para el funcionamiento de Rodalies ya que, con la supresión del paso a nivel, se podría aumentar la frecuencia de paso de los trenes”.
Además de ser un freno para la circulación de los trenes, el paso a nivel ha sido escenario de numerosos atropellos, cobrándose la vida de 27 personas en los últimos 30 años. Se trata de un paso muy concurrido: conecta el norte y el sur de la ciudad, completamente dividida por las vías de tren, y muchos peatones cruzan imprudentemente por impaciencia ya que las barreras pasan largos periodos de tiempo cerradas por el paso de trenes.
Por ello, el Ayuntamiento cree que el soterramiento debería ser una obra “prioritaria” y quiere que se ponga de manifiesto en las movilizaciones que se llevarán a cabo en otoño, en las que busca implicar a las entidades locales y a la ciudadanía en general. El presidente de la Asociación de Vecinos Roses-Castelldell, Silvestre Gilaberte, afirma que “todavía no se ha hablado de esta iniciativa en el marco de la junta de la entidad. Pero, a título personal, creo que no se dan las condiciones para una movilización”.
Gilaberte recomienda al Ayuntamiento “trabajar en silencio, sin grandes fotos, para preparar las condiciones con el objetivo de que el proyecto se pueda llevar a cabo en el momento oportuno, porque Sant Feliu ya se ha llevado muchas decepciones en este tema”.
Información tomada de La Vanguardia.
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