Las once jornadas de protesta, con paros parciales, y tres días de huelga, convocados por los sindicatos CGT y SF-Intersindical contra la segregación de Renfe, aprobada por el Gobierno el pasado mes de septiembre, comienzan este lunes.
Los convocantes rechazan este proyecto, que contempla la segregación de Renfe en cuatro sociedades, una medida con la que el Gobierno pretende preparar a la operadora ferroviaria pública para la eventual entrada de competidores privados en transporte de viajeros en tren.
Los paros parciales de dos horas por turno se efectuarán los días 28, 29 y 30 de octubre, y los días 4, 8, 11, 15, 18, 22, 25 y 29 de noviembre.
Concretamente, los paros parciales convocados para el lunes, 28 de octubre, y los del mes de noviembre tendrán lugar entre las 07.00 y las 09.00 horas; de las 15.00 a las 17.00 horas, y de las 23.00 hasta las 01.00 horas, de la madrugada del día siguiente.
El 29 de octubre, los paros serán de las 07.30 a las 09.30 horas; de las 18.00 a las 20:00 horas, y de las 23.00 horas a la 01.00 de la madrugada del día siguiente.
Asimismo, el 30 de octubre los trenes pararán de las 09.00 a las 11.00 horas; de las 16.00 a las 18.00 horas, y de las 22.00 a las 24.00 horas.
Por otro lado, las jornadas de huelga de 24 horas se han convocado para los días 31 de octubre, así como para el 5 y 20 de diciembre.
El Departamento de Empresa i Treball de la Generalitat ha decretado unos servicios mínimos del 66 % -dos tercios- durante las horas punta, y del 33 % -un tercio- durante el resto del día.
Según la Generalitat, las horas punta, en las que se registra una mayor afluencia de pasajeros, son aquellas comprendidas entre las 06.00 y las 09.30 horas, así como entre las 17.00 y las 20.30 horas.
Los convocantes critican que el proyecto del Ejecutivo supone "una agresión sin precedentes" que conllevará la pérdida de condiciones laborales e implicará un empeoramiento en el servicio que se presta a la ciudadanía.
Asimismo, acusan el "inmovilismo" de otras organizaciones de trabajadores, como UGT y CCOO, frente a este deterioro "del ya de por sí precario servicio ferroviario".
Información tomada de LA VANGUARDIA
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