Todavía no hay fecha exacta, pero que será en septiembre es casi seguro. Barcelona estrenará después del verano una nueva zona verde, el reivindicado parque de Can Rigal, según aseguran fuentes municipales. Se abrirá con retraso: cuando comenzaron las obras a finales del 2010 se fijó la primavera de este año para su apertura. Pero, al menos, y a pesar de la crisis, se ha hecho el parque o, más concretamente, una parte de él. El resto de la zona verde sigue sin calendario. Son las hectáreas que corresponden a l'Hospitalet.Y es que en la segunda ciudad de Catalunya el desarrollo del proyecto está condicionado a que el sector inmobiliario se recupere. Si en Barcelona todo es parque, en l'Hospitalet, además de zonas verdes, se prevé también un área residencial con unas mil viviendas, el 40% de las cuales serán protegidas. Para que haya parque también es necesario que el hospital General de l'Hospitalet, la antigua Cruz Roja, se traslade hasta la carretera de Collblanc, y la transformación de la actual subestación eléctrica. Tres condicionantes previos que, ahora mismo, no tienen calendario. Y si ellos no lo tienen, la zona verde que, eso sí, la ejecutaría el Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB), tampoco. Fuentes del Ayuntamiento de l'Hospitalet lo reconocen: la crisis ha impuesto su propio ritmo.
Así que lo que se dará por acabado en septiembre serán tan sólo 1,9 hectáreas de un proyecto que, en total, suma unas diez. Es la parte que corresponde a Barcelona, cuyas obras han sido ejecutadas por el AMB, que será la que se encargue también del mantenimiento del parque. Esta zona verde cuenta con diferentes áreas para practicar deporte, un área de picnic y otra destinada a actividades para perros. Durante este mes se llevarán a cabo los últimos trabajos de acondicionamiento y se vigilará el arraigo de la vegetación que se ha ido plantando.
Can Rigal será autosuficiente. Cuenta con diversas placas fotovoltaicas y se ha construido un sistema de drenaje que permite la máxima infiltración y recarga del acuífero sobre el que se encuentra -hay una mina de agua en el subsuelo-, lo que permitirá regar el parque sin utilizar agua potable. Las zonas ajardinadas se han cubierto con matorrales y hierbas resistentes a la sequía. La idea es que la zona verde produzca toda la energía que necesite y que tenga a su disposición, por sus propios medios, toda el agua que requiera.
Como concepto, se ha creado como un parque abierto, con pocos espacios cerrados, con arbolado típico del bosque mediterráneo y buscando también continuidad con la vegetación de Collserola. Can Rigal contará, al margen de la zona de picnic, con servicio de bar y un anfiteatro de piedra donde no se descarta que se puedan programar actuaciones teatrales o pequeños conciertos. La oferta lúdica se complementa con varias zonas de juegos infantiles, una destinada a niños de 1 a 5 años -con piscina de arena- y otra para niños de 6 a 12 años.
Información tomamada de La Vanguardia
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