Ya han sido probados en una operación en la que se sancionó a nueve personas | Cada dispositivo cuesta 800 euros
La Policía Local de Sant Cugat del Vallès ha adquirido dos aparatos que detectan la presencia de sustancias alcohólicas en los vasos que se intervienen en las operaciones contra el botellón en la ciudad.
El dispositivo se sitúa en la parte superior del vaso y detecta los vapores para determinar si existe alguna sustancia alcohólica, motivo por el que la persona que está consumiendo en la vía pública podrá ser sancionado con una multa de 375 euros si es reincidente.
"El dispositivo no está preparado para determinar la cantidad de grados de alcohol ni el tipo de bebida que se está consumiendo, únicamente señala si el vaso contiene algún tipo de bebida alcohólica", ha señalado el teniente de alcalde de Seguridad de Sant Cugat, Jordi Puigneró.
La policía ha incorporado dos aparatos en sus unidades destinadas al control del botellón, y una de ellas ya ha sido probada en período de pruebas en la última operación que se llevó a cabo hace unas semanas y donde se sancionó a unas nueve personas.
Cada aparato tiene un coste de 800 euros, una suma que el consistorio prevé amortizar con la imposición de sanciones por el consumo de alcohol en la vía pública, y se prevé la adquisición de una tercera máquina, así como una impresora adaptada que tiene un coste de 600 euros.
Información tomada de La Vanguardia
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